Tener una mascota en casa trae alegría, pero también el desafío constante de mantener el hogar libre de pelo, especialmente en los muebles tapizados.
Uno de los trucos más rápidos y efectivos utiliza el guante de goma de cocina. al humedecer ligeramente el guante y pasarlo por el tapizado, la fricción que genera hace que los pelos se agrupen en pequeñas bolitas que se retiran fácilmente. Este método es ideal porque permite acceder a rincones y curvas donde las aspiradoras a menudo no llegan, y funciona muy bien en sillones, almohadones y mantas de tela.
Otro método sencillo es el uso de una esponja seca o ligeramente humedecida. Al igual que el guante de goma, la textura de la esponja común permite que los pelos se adhieran a su superficie con movimientos cortos. Humedecer apenas puede mejorar su eficacia, pero se debe evitar mojarla en exceso para no dejar marcas en tejidos delicados como el terciopelo o el lino, que tienden a retener más pelo.
Para soluciones rápidas y de bajo costo, los rodillos adhesivos o la cinta de embalaje son herramientas infalibles. Mientras que los rodillos quita pelusas son esenciales para quienes tienen mascotas con muda intensa, la cinta de embalaje envuelta en la mano con la parte pegajosa hacia afuera cumple la misma función a la perfección. Estos métodos son excelentes para retoques rápidos antes de recibir visitas o al salir de casa.
Además de los trucos manuales, existen soluciones más prácticas y de limpieza profunda. Las aspiradoras con cepillo especial para mascotas cuentan con cabezales diseñados con cerdas rígidas que logran levantar pelos incrustados en sofás de tela gruesa. Complementariamente, una solución preventiva muy eficaz es utilizar fundas lavables o mantas estratégicas sobre los sillones. Esto simplifica enormemente la limpieza semanal, ya que basta con retirar y lavar la funda o la manta en el lavarropas.








